Mille Miglia 2011

Todo aficionado al automovilismo sabrá algo de la Mille Miglia, bien por su antigua carrera, bien por su museo, o bien por el actual evento para coches clásicos. Pero este año las marcas de automóviles se han volcado especialmente por esta prueba a la que se le conoce como La corsa piu bella del mondo (la carrera más bella del mundo), y además de la míticas firmas italianas, encabezadas por Alfa Romeo y Ferrari, los departamentos especializados en clásicos de las casas Audi, BMW o Mercedes, así como las marcas Porsche, Jaguar o Saab entre otras han querido estar presentes en la prestigiosa cita italiana.

Hoy día, desde 1977, la Mille Miglia se celebra como prueba de regularidad para clásicos. Existe una clasificación oficial, y algunos equipos se toman muy en serio el resultado, pero lo cierto es que una buena parte de los inscritos acuden a la cita por su belleza, por el ambiente, por el glamour y por la historia con el único objetivo de disfrutar de esta espectacular fiesta automovilística. El nivel de las inscripciones es elevadísimo, y además de aceptar este año a 384 coches, la organización retiene a otros muchos en lista de espera. Es evidente por tanto que son muchos los coleccionistas de todo el mundo que desean participar, pero ser seleccionado no es fácil.

La semana pasada, del 12 al 14, Brescia se convirtió en la capital del automovilismo clásico

En la reciente edición de 2011 (celebrada entre el 12 y el 14 de mayo), como decíamos al principio, muchas marcas se han inscrito directamente. BMW ha participado con numerosas unidades de su 328; Mercedes ha alineado varios SL 300 Alas de Gaviota e incluso algunos SSK y un SLR; Audi Tradition ha llevado cinco DKW; Porsche ha brillado con sus 356 y 550; Jaguar ha mostrado tanto XK, como C-Type y D-Typepero los primeros puestos de la clasificación final han ido a parar a manos de pilotos privados.

El equipo ganador de la Mille Miglia 2011 ha sido el formado por Giordano Mozzi y Stefania Bianca, con su Aston Martin Le Mans 1933. Tras ellos, han completado el podio Carlo y Bruno Ferrari (padre e hijo) con un Bugatti T37 de 1927, y en el tercer escalón Claudio Scalise y Daniel Claramunt, con un Alfa Romeo 6C 1500 de 1933 GS. El mejor equipo de fábrica finalizó en quinta posición, y fue el compuesto por Giuliano Cane y Lucia Galliani, con un 328 de BMW Classic. Y tampoco podían faltar famosos, como la pareja compuesta por Fangio y Hakkinen (el hijo del pentacamepón argentino y el bicampeón finlandés de Mercedes), quienes participaron con un cotizadísimo 300 SLR.

Famosos, bellas modelos, prestigiosas marcas de joyas, muchos coches de más de un millón de euros… La Mille Miglia es todo glamour

Hoy día esta prueba derrocha lujo por los cuatro costados, y varios de los coches inscritos tienen un valor económico superior al millón de euros. El patrocinador principal es la marca Chopard, a las cenas de gala acuden las modelos más bellas de Italia y las personalidades más influyentes, de modo que la corsa piu bella del mondo muestra belleza y elegancia allá por donde va.

El recorrido de mil millas (unos 1.600 km) siempre comienza en Brescia, pasa por Roma, y vuelve otra vez a Brescia; aunque las ciudades intermedias de paso varían en cada edición. En esta ocasión se han visitado, entre otras, ciudades como Verona, Siena, Florencia, Bolonia, Parma o Cremona. El principal requisito para participar hoy día es el de poseer un automóvil fabricado hasta 1957 y que haya participado en alguna de las 24 ediciones de las auténticas y originales Mille Miglia (evidentemente, no esa unidad concreta, sino el mismo modelo).

Finalmente, no podemos pasar por alto lo que fue en su día (desde 1927 hasta 1957) la Mille Miglia, por lo que lo resumiremos brevemente. En los años anteriores a 1950 fecha en la que se creó el Campeonato del Mundo de Fórmula Uno- la victoria en las Mille Miglia era una de las metas más preciadas por los fabricantes y por los mejores pilotos del mundo. La prueba se celebró por primera vez en 1927, y, con el paréntesis de la 2º Guerra Mundial, se disputó en 24 ocasiones hasta 1957, año trágico en el cual el español Alfonso de Portago (nuestro primer piloto de Fórmula Uno) estrelló su Ferrari y causó un accidente en el que murieron trece personas; lo que supuso el fin de la Mille Miglia.

El nombre de esta carrera hacía referencia a las mil millas (unos 1.600 km) que se recorrían en el trayecto Brescia-Roma-Brescia. Eran unos años en los que se corría con la carretera abierta al tráfico, y ya en anteriores ocasiones hubo algún que otro fatal accidente. Los mejores pilotos del panorama internacional disputaban la prueba italiana con el mayor apoyo de las marcas. Fangio, Von Trips, Collins o Fagioli lo intentaron, aunque se tuvieron que conformar con el segundo o tercer escalón del podio. Sí que llegaron a la cumbre de la Mille Miglia otros pilotos de la fama de Stirling Moss, Alberto Ascari, Rudolf Caracciola o Tazio Nuvolari; mientras que, por marcas, Alfa Romeo (11 victorias) y Ferrari (7 victorias) dominaron su palmarés.