El modelo de acceso a la gama de monovolúmenes de Ford es el B-MAX (4,08 metros de longitud). Derivado de la plataforma del Fiesta, aunque con la oportuna revisión para adaptarlo a los cánonoes de modularidad interior del segmento, el B-MAX se ha hecho popular en sus tres años de vida comercial por su sistema de puertas traseras correderas para facilitar el acceso de sus ocupantes.
Ahora a Ford le toca impulsar a su gama B-MAX con unas vitaminas de diseño y personlización, en busca de un cliente joven y algo más emocional, dentro de una categoría en recesión en Europa. De ello se encargará el nuevo Ford B-MAX Colour Edition que hoy os presentamos, con un diseño exterior más elegante y exclusivo y detalles específicos en su habitáculo.
Unas vitaminas de diseño y personlización
Disponible en Europa a principios de 2016, el B-MAX Colour Edition cuenta con una variedad de diez colores exteriores combinados con techo y parabrisas en color negro, también cuenta con llantas de aleación de 16 pulgadas con acabado en negro opcionales, junto a una rejilla en negro brillante, difusor delantero y trasero de color negro, lunas tintadas traseras y un spoiler trasero de gran tamaño sobre el portón trasero.
Por dentro, las especificaciones afectan al sistema de conectividad, activado por voz Ford SYNC con pantalla de cinco pulgadas a todo color y navegador opcionales, climatizador manual y un pack opcional con costuras en hilo marrón Cognac para los asientos, volante, funda de la palanca de cambios y alfombrillas.
El Ford B-MAX Colour Edition sólo se puede combinar con la mecánica de gasolina EcoBoost 1.0 litros de 140 CV de potencia máxima. El motor, equipado con Auto-Start-Stop de serie, alcanza una aceleración de 0-100 km/h en 10.4 segundos con emisiones de CO2 de 116 g/km y una economía de combustible de 5.0 l/100 km.