La tecnología de electrificación eDrive, que da vida a la familia de modelos i de BMW, se prolonga a la gama tradicional de la marca de la hélice, concretamente a uno de sus bastiones más reputados y exclusivos, el SUV de 4,89 metros de longitud X5. La versión se denomina xDrive40e, tiene una potencia conjunta de 313 CV, y básicamente viene a calcar el sistema de propulsión híbrido del i8.Calca el esquema híbrido del deportivo i8
El esquema mecánico combina un motor de gasolina de cuatro cilindros TwinPower Turbo de 245 CV de potencia y 350 Nm de par que mueve las ruedas posteriores; uno eléctrico acoplado en el cambio automático de ocho velocidades de 113 CV y 250 Nm que hace funcionar el tren delantero; y unas baterías de iones de litio de 9 kWh (situadas bajo el piso del maletero, que se reduce de 650 a 500 litros, e impide configurar 7 plazas) que se recargan principalmente con una toma de corriente externa (un enchufe convencional en 3h y 50 minutos o con el poste Wallbox en 2h y 45 minutos) y en menor media con la frenada regenerativa.
Funcionando como eléctrico, su autonomía es de 31 kilómetros y su velocidad máxima de 120 km/h (modo MAX eDrive activado a través del botón eDrive de la consola central). Son datos de homologación, que en un uso real (según el estado de las baterías o la climatología) pueden variar, como el consumo mixto, de 3,3 l/100 km (equivalente a 77 g/km de emisiones de CO2). Activando el programa AUTO eDrive, el motor de combustión cuenta con un apoyo del motor eléctrico en las fases de aceleración y recuperación, lanzándose de 0 a 100 km/h en 6,8 segundos. Además puede seleccionarse el modo SAVE Battery, que mantiene el nivel de carga de la batería de alto voltaje, propiciando la mencionada recuperación energía si las baterías están en mínimos.
Cuando llegue al mercado, en el último trimestre de 2015, el BMW X5 xDrive40e se encontrará con rivales de características similares, como por ejemplo los Porsche Cayenne S E-Hybrid (416 CV), Volvo XC90 T8 TwinEngine (400 CV) y, meses después, en primavera de 2016, se unirá a la fiesta el Audi Q7 e-tron (373 CV) que acaba de ser presentado en el Salón de Ginebra.
Cuando llegue en otoño será menos potente y rápido que los modelos similares de la competencia