La detección de averías en los coches se da a partir de los 126.000 kms

Ésta es una de las conclusiones de un informe de la empresa de ‘renting’ (alquiler de coches a largo plazo), en el que también se constata que un 55,8 % del total de las intervenciones son revisiones programadas por el fabricante como mantenimiento preventivo, es decir operaciones como cambio de filtros y otras sustituciones previstas por la marca).

Tras las revisiones de mantenimiento, el motivo más frecuente para visitar el taller, en un 23,9 % de los casos, son las reparaciones de averías simples, seguidas de las de desgaste menor (17,7 %) y, en un 14,7 % de las ocasiones, el cambio de accesorios menores del vehículo.

Sólo el 6,2 % de las intervenciones son averías complejas como reparaciones en el motor, la culata, la caja de cambios o el sistema de inyección, mientras que el menor número de intervenciones (2,5 %) se produce por desgaste mayor.

La estancia del coche en el taller pueden oscilar entre un día de media en las reparaciones por desgaste menor, hasta diez en las averías complejas. El término medio se sitúa en 4,95 días.

Una buena porción de las averías se relaciona con descuidos del conductor o uso incorrecto del vehículo y en este apartado, la equivocación a la hora de repostar es la causa más común, con un 41 %, de generación de avería.

Le sigue olvidar las llaves en el interior del vehículo cerrado (25 %) e ignorar deliberadamente los testigos luminosos que aparecen en el salpicadero (23 %).

Los resultados son producto de las intervenciones que Lease Plan ha efectuado a los coches de su flota a lo largo de un año, mediante el estudio de factores como el tipo de intervención, el tiempo de estancia en el taller, el kilometraje de los vehículos y las negligencias detectadas en su uso.